
Considérense muy dichosos
cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas, pues ya saben que la prueba de su fe produce constancia.

Las personas son como bolsitas de té. No sabes lo que hay dentro de ellos hasta que los pones en agua caliente.
El estrés y los problemas tienen la misteriosa habilidad de mostrar nuestro interior.
Dios dice que, “considérense, muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas”. La palabra “considérense” nos dice que podemos elegir. No podemos elegir que problemas tener, pero siempre podemos elegir como responde: entonces, ¿cómo quiere Dios que respondamos a nuestros problemas? Él quiere que consideremos responder con gozo. De hecho “¡con mucho gozo!”