Una vez dijo Robert Louis Stevenson, “No hay otra cosa en el universo que la grácia de Dios”. Caminamos en ella, la respiramos, vivimos y morimos por ella. La gracia de Dios es lo que mantiene todo unido. Si no existiera la gracia de Dios, tu vida se desmoronaría, tu familia de desmoronaría, tu país se desmoronaría, el mundo dejaría de rodar sobre su eje. Todo está sostenido por la gracia de Dios. Todo en la vida es una bendición de Dios.